¿Qué es tripolar? Me preguntó Lady Laca. Esto debe de ser psiquiatría gallega, por aquello de: arriba, abajo y “depende”, pensé yo. Pero no, parece que es una patología de origen murciano. ¿Los efectos de que nieve en Cartagena?.
De todos modos, antes de que pudiera elaborar mi respuesta ella ya había cambiado de tema. Aunque debería aclarar: viró AL TEMA. Porque desde que mi madre es SOPRANO (y nadie la ha contradicho) hay, básicamente, uno: sus conciertos.
Mi madre, siguiendo la estela de su paisana Charo, es pequeña pero matona, y como auto-artista funciona. Lady Laca podría enseñar marketing a los americanos.
Ella no canta en iglesias, ACTÚA en BASÍLICAS (da igual que google maps no las localice). La sitúan en la fila de delante del coro porque es “primera voz”, y cuando graban un especial navideño en su televisión local, encuentra a ésta “muy pobretona” comparada con otras televisiones en las que ha cantado. “Que no tienes ni una sala para ensayar o dejar los abrigos, no como en TVE o incluso en la de Sant Cugat”.
Ella es así. Y bien que hace.
Si el que canta su mal espanta a ella no le quedan ya fantasmas. La primera vez que conoció a su consuegra se arrancó una copla en la terraza del restaurante donde comimos y le soltó: “usted me puede llamar Antonia o Lady Laca, lo que prefiera”.
Ese día lo bordó –en nuestra boda no tanto, con una ranchera de Rocío Dúrcal, pero lo achacó al audio-, porque además tocó un tema fundamental en la familia de PITICLI: les encanta cantar (pese a su falta de oído).
Lady Laca oído tiene, pero no autocrítica, detalle que compensa con su elevadísima competitividad (ahora que lo pienso, debe de ser de familia). A los ensayos llega con la letra aprendida y el fular sujeto a la camisa con dos agujas para que le quede exactamente simétrico. También acude con agujas para poner bien los fulares de sus compañeras, y entiendo que, a unas malas, para el vudú también servirían.
El caso es que ciertamente está teniendo mucho éxito. Y yo me alegro. La veo tan contenta que parece que vaya a salir volando como los de La La Land, cuya banda sonora no paramos de cantar y bailar PITICLI y yo.
Se lo comenté a mi madre y le propuse cantar alguna canción de la película conjuntamente, pero no ha podido ser porque ella no es de inglés, es más “de las lenguas del Estado” (que hasta en asturiano ahora canta).
Tendremos que esperar a que las traduzcan entonces. De momento seguiremos cantando, bailando y soñando cada uno a nuestro gusto.
-Oye, Antonia, ¿no será eso el tripolar? -¿El qué? ¿Bailar, cantar y soñar? No creo, pero me gusta.
Pues entonces tripolares bailaremos, cantaremos y soñaremos porque “it’s another day of sun”.
¡Sed muy Felices!
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Showgirls mataroní, ya lo estoy viendo… unas escaleras, unas perlas sueltas por el suelo y alfileres de voodoo.
Ay madre, espero que en vez de Show Girls revivan Burlesque, que acaban todas contentas y amigas, jaja. Lo que no sé es si Lady Laca querrá Christina o Cher…
Lo de la tripolaridad, efectivamente, es porque ha nevado en Cartagena, que en esta ciudad salimos a la calle con un bañador debajo del anorak, por aquello de los cambios climáticos. Así estamos su madre, Charo Baeza y yo: ¡como cabras! Y que se prepare Charo, que Lady Laca está a un paso de tener su propio espectáculo en Las Vegas junto a Siegfried y Roy. ¡Besos mil!
Querida Musa, ahora lo entiendo todo. ¡Que tiemble Las Vegas! Un fuerte abrazo 🙂
Querido HKB: los que te seguimos ya conocíamos el arte de tu madre sobre todo en la cocina y posando en las fotos, si además tiene arte vocal, no puedo mas que felicitarte por tu suerte en el reparto de genes que te tocó!, otra cosa es que tú los hayas aprovechado!! (me consta que sí, pero en la cocina??).
Un abrazo para ti, Lady Laca y por supuesto Piticli!!
Jajaja. Pues creo que cocino mejor que canto (el arroz me sale delicioso en cualquiera de sus variantes). Pero la verdad es que mi madre es una ARTISTA polifacética difícil de igualar.
¡Besos enormes!
Mola tu madre!! 🙂
…bueno, como tú, claro
besote.
Jajaja. Ella casi que más, jaja. ¡Tú sí que molas! ¡Gracias por tus palabras!