La Navidad puede ser una época fantástica pero también una trampa. Hay fechas, como San Valentín o Sant Jordi, que te apuntan con el dedo en función de tus circunstancias, porque son momentos que nos han vendido que tenemos que estar felices, tener pareja, amigxs, una familia fantástica, dinero… y la realidad puede ser otra (pérdidas, separaciones, estar lejos, familias desastrosas, precariedad…).
Mirad, yo vengo de una familia disfuncional, y eso me ha servido para sufrir pero también aprender mucho. Y como la Navidad es compartir, aquí os traigo estrategias que adquirí. Aquí os las traigo.
HUYE. Viajar en Navidad es bastante económico (no confundir con Fin de Año). Yo recomiendo ir a las Canarias, por ejemplo. Mi refugio, como sabéis, es Lanzarote, y no hay nada mejor que pasar el 25 de diciembre, desnudo, en Playa Papagayo.
También puedes TRABAJAR. Hay muchos lugares que buscan trabajadores y puede ser un buen momento para adquirir experiencia y encima ganar dinero en vez de perderlo.
Si no puedes viajar, SELECCIONA BIEN TUS COMPROMISOS. Mira qué comidas o cenas no puedes evitar pero también cuáles no soportarías y elúdelas. Lo mejor, como decía Boris Izaguirre, es una excusa simple: “me es imposible acudir”. Ah, y sal de los grupos de whatsapp.
Una vez en aquellas comidas que no puedas descartar, vigila los EMPACHOS. Lleva Almax, protector gástrico o incluso Fabe de Fuca por si al cabo de unos días aún no te has desahogado. Si ves que no puedes comer más, saca el comodín del VEGANISMO y di que te has hecho veganx. El menú será mucho más digestivo.
BEBER. Ponte un límite o pacta con alguien que te avise cuando vea que estás bebiendo más de la cuenta, especialmente si hay móviles cerca que puedan grabarte.
CONVERSACIONES PELIGROSAS. Hay dos clásicas: política y trapos sucios del pasado. Evítalas. Respira. Bebe. Muestra interés en lxs demás. Toma trankimazín. O, como en el apartado anterior, pacta con alguien que te frene a tiempo. Como sabéis yo tengo una palabra clave con PITICLI para ello.
Otras opciones son llevar una lista de temas preparada (os aseguro que conozco gente que lo hace) o de juegos. En mi familia funciona mucho el de adivinar un personaje o el bingo (aunque se juega con dinero y es peligroso).
LUGAR EN LA MESA. Intenta ser tú quien lo elija, puede ser vital para tu supervivencia. Llévalo pactado si es necesario. Y más si es en una cena de empresa.
VILLANCICOS y canciones de borrachera. Ibuprofeno, escapadas al WC o salir al balcón te resolverán algunos minutos. Si puedes, cambia villancicos por Karaoke.
REGALOS. Tema clave. Que quede muy claro el precio pero, sobre todo, da pistas de qué quieres que te regalen sin pudor. O pide tarjetas – cheque regalo. Si no saben qué regalarte recuérdales lo útil que es el cash.
FOTOS. Otro temazo. La mayoría serán en mesas y borrachx. Hazlas siempre mejor antes de comer. En caso contrario, el photoshop, el “modo dron” o mirar de perfil te ayudarán a parecer menos perjudicadx. Si se trata de fotos de grupo evita los extremos, que deforman.
FIN DE AÑO. Siempre es un drama a qué fiesta te invitarán o no, cuánto te costará la misma… mi consejo es que la montes tú con la gente que te apetezca, y que la planifiques con bastante antelación.
Y para finalizar, sólo dos apuntes:
-Recuerda que para otrxs puedes ser tú ese familiar odiosx, así que ten paciencia.
-Las Navidades pasan y llegan… ¡las rebajas!
¡Sed muy Felices!
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Con estos consejos este año las navidades pasarán volando: arreglados, sobrios y empachados pero con Almax… ¡vivan las fiestas! ¡abajo la imposición de la falsa alegría!
Abajo esa imposición y arriba la gente maravillosa como tú. <3
Querido HKB: nosotros seguimos tu primer consejo hace tiempo y somos más felices en estas fechas! Lo demás va surgiendo… felicidades por tu libro. Un abrazo!
Muchísimas gracias compañera. Sois una familia ejemplar, hasta para viajar en Navidad. Muy fan <3