Segundas Rebajas en la Selva

\"así\"furor


\"descuento.jpg¡Terror en el Hipermercado! ¡Furor en el Ultramarinos! Querid@s amig@s, llegaron las rebajas a nuestra selva particular. Estos días anda todo rebajado. Todo, todito, todo. Y no sólo la ropa, los muebles… ¡qué va! Han llegado las rebajas del Corte Inglés y también las de nuestra sociedad.


\"tienducaA mí siempre me han gustado las rebajas, pero este año no les pillo el truco. Todo lo que me gusta resulta que no está rebajado. Palabrita del Niño Jesús. He ido a varias tiendas, he seleccionado los artículos, y, a la hora de pagar: \»lo siento, este artículo no está rebajado\».

¿Seré gafe? ¿O es que sólo me gusta lo nuevo / atemporal?

¿Será que, pese a los datos de mi cuenta corriente (y la visa), no estoy destinado a ser pobre? ¡Ay madre, ojalá sea eso! ¡Quiero nadar en una piscina como la del Tío Gilito!

Nada, que a mí este año sólo me gusta lo bueno. Eso o que tengo un radar especial.


\"miraY prometo que lo intento, pues parezco Sherlock Colmes en el supermercado, venga mirar y remirar los productos de oferta, que no veas cómo está la \»cesta de la compra\», que parece la resta de la honra. ¡Si incluso intento regatear!

Y es que… qué poco lucen ya los euros, querid@s amig@s. ¿Nos cambiaron la moneda por duros sevillanos y no nos dimos cuenta?

\"terrorLo único que he sacado a buen precio recientemente ha sido un imán de nevera con una flamenca y un torero que conseguí al 50% en la tienda de recuerdos típicos de Spain regentada por un paquistaní, y porque le dije: \»amigo, no me lo cobre a precio de turista que soy del barrio\». Y coló. Lo cierto es que con lo que me gasto en flamencas bien lo podía hacer. Últimamente, cuando no sé qué regalar a alguien, le compro una muñeca sevillana, que seguro no tienen, y me quedo tan a gusto.

Pero a lo que iba, que yo miro a mi alrededor y no lo entiendo, pues estoy rodeado de rebajas. Especialmente en la educación de la gente.

Os pondré varios ejemplos:

\"niños         Los Gremlins. Hace unos años, los Gremlins eran unos monstruitos que salían en las películas. Ahora no, ahora son seres de la raza humana menores de edad (en su mayoría, aunque también los hay adultos). Los reconoceréis porque no llevan bozal, se tiran con los zapatos puestos en los asientos del bus, tiran las bolsas de snacks donde les parece y pegan y berrean como los gorrinos en la matanza en restaurantes, tiendas, etc. Algunas veces, aún a riesgo de recibir una coz o un improperio de los padres (que suelen ir a juego), les digo algo para que se contengan, con mucha dulzura y amor, como invitarles a que bajen de las esculturas del museo, etc. pero no siempre resulta. Al menos, por suerte, no soy maestro (pobrecillos, les compadezco y atiendo en consulta). Obvio el tema de los comportamientos en las escuelas pues es más doloroso que un flemón + una depilación inguinal y una otitis a la vez.


\"tarzan        
El desodorante (o mejor dicho, la falta de). La higiene está de rebajas, decididamente. Cada mañana, al tomar el metro, no sé si ponerme gafas o lentillas. ¿Por qué? Pues porque del pestazo de los pliegues de la gente se me nublan los cristales. ¿Es que ya no se lleva? ¿Leyeron \»Rollón\» en vez de \»Roll-on\» en el frasco y desistieron? ¿Dónde quedó el frescor salvaje de FA? Será éste el verdadero frescor salvaje? ¡Un poquito de humanidad, por favor!


\"nena        
L@s depentient@s. ¡Si parece que al atenderte te hagan un favor! Antes sólo sucedía con l@s camarer@s y porter@s de discoteca, pero por lo visto debe de tratarse de algún virus que se propaga en el sector servicios. La próxima vez iré a comprar cargado de dardos – antídoto o algo por el estilo.

         La gente en la playa. La otra tarde le propuse a PITICLI ir a tomar una copa en una terracita al lado del mar. Pues bien, debería haber dicho: al lado del mar de estiércol. ¡Ay madre! Si no se veía la arena entre tanta botella vacía, lata, bolsa, etc. Pero claro, igual, como somos tan alternativos, no me había dado cuenta y habíamos ido a tomar algo a un basurero. Era precioso. Una puesta de sol al más puro estilo futuro Mad Max. Los rayos de sol se reflejaban en los plásticos ofreciendo una estampa inolvidable. ¡Ay, la evolución! No puedes vivir con ella y tampoco sin ella.


\"tipa        
L@s vecin@s. yo no me puedo quejar, pues son un sol en su mayoría, pero cuando te toca un@ de los que gustan de poner la música discotequera o caribeña hasta las tantas de la mañana… no sabes si ahorcarte o ponerte los manguitos para el número del COPACABANA.

 

En fin, amig@s, que la cosa no pinta demasiado bien. Las rebajas, o los \"lasaldos, han llegado a nuestra sociedad. Supongo que habrá que acostumbrarse, o incluso intentar sacar tajada. Pero me cuesta, pues como os dije al principio, algo me debe pasar que ahora sólo me gusta lo bueno.

¿Y a vosotr@s?

Mientras esperamos la nueva temporada…

 

¡Sed muy felices!

 

12 comentarios en “Segundas Rebajas en la Selva”

  1. ¡Hoooooooooooooooooooola Agustín! (las “o” las puso el ordenador, pero las dejo, me gusta como quedan)
    Estoy en el despacho: fax, teléfono, papeles, visitas, más papeles, más faxs, ¡emails!…. y entre ellos aparece el tuyo
    No he podido resistir a tentación de abrirlo…………. ¡me ha cambiado la cara! No puedo parar de reír
    Un consejo: dedícate más a esto, se te da muy bien, y contribuirás a hacer la vida más alegre a muchos
    Espero que estés bien
    ¡Un abrazo!

  2. Under the Spell of Sales

    Por fin alguien se ocupa de este tema!!!
    Sobre las supuestas rebajas económicas:
    1.- Siempre elijo lo más caro de la tienda (sea época de rebajas o no)
    2.- Nunca hay la talla que necesito.
    Pero lo que más me ha gustado es que alguien más se ha fijado en la «rebaja» de los estándares del comportamiento social: me asusta porque por un lado me hace sentir decimonónico, pero por otro lado es que es espeluznante lo poco social que son los comportamientos de las masas (y yo soy masa, pero creo que voy a darme de baja). Hay tantos casos que es difícil resumir. Pero de todos, junto a los que ya has mencionado (móviles con reggaetones en manos libres sonando a lata -realmente les gusta cuando suena así???- y el cursillo de las dependientas de Zara de cómo ser la choni más borde del lugar), quiero poner en evidencia a todos esos CUTRES que no saben masticar chicle con la boca cerrada en el modo mute… basta ya de revolvernos las tripas a las ocho de la mañana!!! (lo digo gritando mentalmente).
    Gracias, Hong Kong Blues, por permitirme este exabrupto liberador…

  3. Querido, te siento un poco tenso, no? ¿Es por las rebajas, en lo que a educación/sociabilidad se refiere, o porque ya vas necesitando unas vacaciones? 😉
    En cualquier caso, estoy totalmente de acuerdo contigo, yo me dedico a mascullar improperios todas las mañanas camino del trabajo: estamos perdiendo los buenos modales, el buen gusto y el saber estar. Una lástima. Pero para eso nos trajeron al mundo, para solucionar este mal.
    Y por cierto, padeces la misma enfermedad que yo: predilección por lo que no se puede pagar y/o lo caro-carísimo
    Besitos mil

  4. María José

    Hola,
    Espero que después de tu reincorporación te tomes las cosas con calma. Me alegro de que estés otra vez en la brecha. Esta vez no estoy demasiado inspirada, solo pasaba por aquí y te dejo un besito antes de irme de vacaciones. Por cierto y a título anecdótico, yo cojo el autobús y desde la huelga de estos donde los servicios mínimos hacían que la espera entre autobús y autobús fuera interminable, la gente ha puesto de moda el entrar por las puertas de salida. Lo asombroso es que el autobús abre por la puerta de entrada pero hay ciertos energúmenos que comprendiendo que tienen que ir a trabajar, igual como los que entran por dónde se debe, entran por dónde se sale y con ello consiguen a mi pobre entender varias cosas, que dificulten la salida de los que allí bajan, que entren por la cara cuando los demás parroquianos pagan por ellos, que den mal ejemplo a los niños que puedan estar por ahí y lo peor de todo, que se hayan convertido den Gremlis y sea una enfermedad contagiosa.
    Cuídate.
    Un beso. María José

  5. Querio Boni, espero que estes mejor.
    El sentimiento mas profundo del HOMO SAPIENS es desear lo que sabe que nunca tendra, creo que ese es el matiz de nuestra existencia y demás querer siempre a la persona que nunca nos correspondio, querer un beso de amor y solo recibir uno de pasión descafeninada de fin de semana o de polvete de sabado sabadete , no se POR QUE ? siempre queremos lo que no TENEMOS , las rebajas son solo un pequeño puente con un poco de aluminosis de que quizas si podemos tener ese algo Pantalón/Bolso/Zapatos que quizas por un instante pueden ser nuestros aunque sea de temporas pasadas o de colores horteras lo que importa para muchos en la MARCA o el DISEÑO no? . Tu que opinas adorado Salvador Claret ,,,,,,,,.
    Quiero ser la unica que no tenga nada que decir ante tanto egoismo por que comprenda que ya no hay nada que decir ? Ya que no hay solución cada vez vamos a peor eso esta claro,,,,,,
    musa timida ( sin dolor )

  6. Tengo que confesar que, aunque siempre leo tu blog, no siempre me encuentro igual de inspirada para escribirte. Pero esta vez no quería dejar pasar la oportunidad…me encanta lo que dices y, realmente, me ha hecho pensar… Ahora mismo vuelvo de un fin de semana familiar. En la comida, hemos estado hablando, precisamente, de rebajas sociales, y no me refiero a los tenebrosos recortes en prestaciones que espero, la crisis no nos depare, sino de educación. Hoy, en la playa, unos niños jugaban a las palas. Los niños no eran un prodigio de este deporte y acababan dando con la pelotita a una francesa de mediana edad y escasa paciencia que les ha pedido que jugaran en otro lugar. En ese mismo instante, el padre de las criaturas que hasta ese momento parecía dormitar en su hamaca, se ha levantado y le ha gritado a la francesa que a sus hijos sólo les daba órdenes él. Y Olé. En favor de mi compatriota, podríamos decir que la turista no ha sido todo lo educada que podía y que se ha quejado de manera excesiva. Pero lo cierto es que, sin querer defenderla (como buena gironina de adopción nunca me gustaron los gabachos aunque intente con ahínco afrancesar mis modales), la mujer tenía razón. Y tampoco se ha pasado. No les ha arrebatado las palas a los niños para prenderles fuego con su mechero. No ha cogido la pelota y la ha enterrado en la arena. No ha pegado dos bofetones a los mocosos… nada. Sólo les ha pedido que jugaran en otro lado. ¿Por qué, entonces, la exagerada reacción del padre de los menores?
    La respuesta he creído intuirla en una anécdota que ha contado mi primo durante la comida. Mi primo es policía y, a pesar de eso, le quiero. Ayyy… bueno, contaba mi primo que, el otro día un mosso amigo suyo se quejaba por el trato que habían recibido de unos jóvenes a los que intentaba detener. Según nos contaba, los mossos habían acudido a una casa de la zona alta de Barcelona en la que se estaba organizando una fiesta. Al parecer, los jóvenes y acaudalados mozos (no los de escuadra) se habían gastado una fortuna en alcohol y drogas lo que había acabado haciendo mella en sus tiernas, delicadas y siempre a la moda estampas. El alboroto que estaban formando era descomunal y un vecino acabó llamando al 080. Cuando llegaron los mossos pidieron que dejaran de hacer ruido. Los jóvenes se rieron. Los mossos insistieron y los jóvenes también. Al final y viendo que aquello no podrían solucionarlo por las buenas, decidieron realizar detenciones. «Aturat malefactor, no t’escapuleixis» dirían los mossos y los adinerados jóvenes se partían de la risa pensando que iban a ser detenidos por el mismísimo Pompeu Fabra. Uno de ellos, que debía ser el cabecilla, le djjo a uno de los policías catalanes: «Tranquilo mileurista que no tienes ni idea de quien es mi padre». Y así fue. El padre del joven llegó rápido a la llamada de auxilio de su vástago y el pobre policía-mileurista tuvo que pedir perdón.
    La sensación de superioridad, sea real o ficticia , debe estar detrás de la mala educación.
    En otro orden de cosas, desde hace 72 horas me atormenta una cuestión: Jung sostenía que podemos heredar el subconsciente y colectivizarlo, he escuchado muchas veces que la piel tiene razones que la razón no entiende y recuerdos y memoria… ¿La tendrá también el pelo? El pelo que crecía a razón de dos centímetros al mes mientras amaba a mi ex, que viajó conmigo a Amsterdam, a Roma y a los Ángeles, ¿me encadenaba al pasado? ¿era él la razón por la que no podía mirar hacia delante? ¿Me impedía olvidar? Sólo de ese modo puedo entender que, desde que me corté el jueves mi melena, vea la vida de una forma tan diferente. Y si así fuera, ¿no me habría sido mucho más barato ir a Cebado hace 9 meses en lugar de a la terapeuta?
    Besitos,
    Yo

  7. Querido Luis: no sabes cuánto me gustó recibir este mensaje! y es que YO ESPERABA UNA SEÑAL! jaja. qué gusto saber que te pasas por Hong Kong y que lo disfrutas.
    a ver si poco a poco puedo llegar a vivir del cuento. 😉 besos!
    Compañerísima Mercè: aunque no lo creas, me encanta el transporte público. también me gusta el taxi, sobtre todo de noche y en la ciudad (tiene algo, no sé), pero lo que más me gusta es el civismo. me podrías decir dónde lo puedo encontrar?
    un beso y gracias por pasarte, camarada!
    Amigo UtSoS: te veo más quemado que la pala de un churrero. bienvenido al club!
    sí, hijo, sí. aunque lo del chicle a mí «ni fú ni fá», lo del manos libres con el «reggeton» me parece a la altura de la gota malaya.
    y lo de las tallas en rebajas… qué razón!
    un beso muy fuerte. me alegro que el comentario te haya servido para «descargar»!
    Seguidísima Kiku: aunque éste no es el lugar, quiero decir que te hice un comentario pero que el WEBSERVER me castiga y no aparece en tu fantástico blog.
    somos almas gemelas, reconozcámoslo.
    de pequeño incluso tuve un período pelirrojo. ahora sólo tengo «restos».
    madre mía cómo está el patio. si es que da penita.
    y lo caro, qué caro está! pero qué bonito es a veces!
    aunque tú ya sabes que a mí me gusta más una ganga de segunda mano que a un tonto un lápiz.
    un beso fuerte, maestra!
    Sabia María José: por lo que describes, con tu gráfico ejemplo, el panorama actual es un poco «MARIC*N el ÚLTIMO», o, más finamente, sálvese el que pueda.
    me alegra que haya gente como tú. de verdad. eres un sol y una estupenda cronista.
    besos!
    Adorada Musa Tímida: ahora que no está La Jurado, creo que sin duda ERES LA MÁS GRANDE.
    FILÓSOFA! GENIA!
    eres total. absolutamente total. lo del puente me ha encantado.
    pero de dónde sacaste tanta sabiduría, hija!
    gracias por iluminar mi post con tu comentario. Grande!
    Maravillosa La Leona: me ha gustado muchísimo tu comentario. hija, nadie va a entender cómo es que no eres tú la blogger!
    tu estilo me suena… me suena… a «Rusa reconvertida». no sé, un poco «Petrovska renovada!»
    habrá sido el efecto «Sansón» de tu corte de Melena»
    estaremos hablando, en ese caso, del efecto «Vidal Sansón» en vez de Vidal Sassoon?;-)
    en fin, que las imágenes que propones hablan por sí solas.
    y vaya imágenes!
    pobre francesa, aunque no fuera lo más de las buenas maneras.
    qué pena de padres (el del niño playero y el del fiestero). miedo me da a mí ser padre viendo estos ejemplos.
    crees que lo sabremos hacer mejor?
    un beso y mil gracias por dejar tu huella!

  8. yo lo que peor llevo es lo del desodorante. pero y aquellas/os que abusan de las colonias? habría que colgarlas/les!
    gracias por tu bienvenida!

  9. ¡Hola! Acabo de ver tu comentario del otro día, ¡muchas gracias! Entre la vorágine de OT y que ahora perversos entes extraños a mi me publican los comentarios, de la mitad ni me entero…
    ¡Un besazo!
    Veruca

  10. De verdad que yio juraría que este post lo comenté en su día, pero bueno.. a lo que vamos, que yo (debido a las rebajas) cada vez me siento más y más misántropo, tan y tan misántropo que es que aunque me sumo a todos y cada uno de tus lamentos socioculturales y educacionales pues como que paso muy mucho de desgastar mi delgadísimo y finísimo teclado apple en determinados agentes. ¡Ea!
    (Ya era hora de volver o, mejor dicho, regresar, echaba de menos estos lares).

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