A mí la gente que lee me resulta muy sexy.
No sé, es verlos ahí, en un parque, o en la playa, con su libro (ya ni os digo cuando es un libro en papel) y ponerme tó perraco.
¿Y si llevan gafas? La idea de quitárselas después de la lectura también me resulta excitante. Me va el streaptease intelectual.
De todos modos no penséis que tengo una libido super exigente, para nada. No me hace falta que lean a Kant ni a Joyce, ni tampoco me desanima que lean novelas gráficas, blogs, o el gran éxito de ventas del momento. Qué va. A mí lo que me pone es que lean.
¿Será porque toda la vida me gustó lo exótico e infrecuente?
¿Estarán realmente los lectores en peligro de extinción?
¿Tendrán razón quienes aseguran que sólo se observan en manadas en determinados barrios – reserva snobs de ciudades -y en islotes nórdicos- y que se desintegran cuando dices tres veces la palabra “telecinco” frente a ellos?
¿Qué comerá un lector?
¿Serán los únicos que aún no hayan perdido su capacidad de concentración?
Sea como sea, cuidemos a los lectores, amigos. Porque sobre todas las virtudes que les adornan, una brilla más que un traje de Lady Gaga: dan sentido a los escritores.
Mucha gente se pregunta: ¿Y a los escritores? ¿Tendríamos que cuidarlos también? ¿Deberían obligarles a todos a cuidar su imagen personal? No respondáis.
Yo tenía pensada una serie de posts titulada “PSUEC – Por Su Ego los Conoceréis” dedicada a esa gente que cree que con su presencia da color y sentido al Universo los artistas, y en primer lugar deseaba abordar el fabuloso fenómeno de los escritores. ¿Por qué motivo?
Porque de entre todos los “creadores”, los escritores se llevan la palma en el maratón del egocentrismo.
La Cámara Kirlian ha demostrado que los escritores, independientemente de su estatura y peso real, consiguen mantener un ego más grande que la pirámide de Keops (si el escritor en cuestión resulta ser argentino, mayor que todo el recinto arqueológico).
¿Cómo lo hacen? ¿De qué se alimentan para lograrlo? ¿O acaso, como algunas fuentes ornamentales, se retroalimentan?
Sea como sea la evidencia nos indica que se les puede echar de comer aparte.
Un pensador decía que hay dos tipos de personas en el mundo: los contadores de historias y los que desean escucharlas. Todavía no queda claro si esos roles se pueden intercambiar, dado que no hay pruebas fehacientes de escritores con capacidad de escuchar (observan y cotillean en busca de textos, pero no hay que confundir).
Recordad, son cuentistas.
Mucha gente se plantea cómo debería comportarse en caso de toparse con un escritor. No es una respuesta fácil.
Yo recomendaría, si el escritor aparentara un narcisismo lo suficientemente amarrado controlado y conservara mínimamente intacta su humanidad, probar a relacionarse con normalidad con él. Pero sólo si es estrictamente necesario (imaginad que os pregunta una dirección, por ejemplo).
En caso de comportarse como una altiva a la que el mundo le debe algo María Callas incomprendida, lo mejor es dejarlos a su aire y no molestarles. Total, solos están muy a gustito.
Tampoco se trata de maltratarles, ojo. A diferencia de los animales del zoo, a los escritores se les puede tocar un poco y alimentar otro tanto. Pero cuidado, pueden morder.
Las personas muy valientes y entrenadas incluso pueden intentar ayudarles a que puedan parir su huevo, bueno, su historia.
Pero si sois almas sensibles -y además queréis resultar sexis a mis ojos- lo mejor que podéis hacer siempre es leer sus historias.
Si lo leído os ha gustado, atreveos incluso a alabarle la obra (se han oído casos en que el escritor hasta ha invitado a una cerveza y unas bravas tras el piropo). Si lo leído os parece una soberana porquería, por mucho que el propio escritor os pida “una opinión sincera”, no lo hagáis. No es verdad que puedan manejarse con las críticas. Un silencio elegante y una caída de ojos, y listos.
Ayer entregué el borrador de mi novela a la agente. Invoquemos al Universo.
Y mañana, casi no me lo creo, ¡por fin empezamos nuestras vacaciones!
Me tomaré un descanso del blog durante unas semanas. Pero como sé que sois muy sexys, os dejo qué leer (además de mis compis en HOLA.com, claro).
rosapalo.blogspot porque tiene una pluma brillante y una inteligencia incisiva
yonosoygente.com porque es la Bridget Jones patria
estoybailando.com la bloguera más débil porque te partes de risa con las descarnadas y certeras historias de blogueras
holataipei.com porque nos habla de la vida en un lugar tan desconocido como Taiwán
taipeistreetstyle.com porque nos muestra el estilo en la calle en Taipéi, y porque quizá nos encontréis, dentro de unos días, en sus fotos
Y como libros, he de deciros que últimamente me han enganchado muchísimo \»Matar a un ruiseñor\» y \»La verdad sobre el caso Harry Quebert\»
Nos reencontramos en unas semanas.
¡Sed muy Felices!
¡Nos vemos en Instagram !
🙂 Grupo de Hong Kong Blues en FACEBOOK.
Es verdad que la gente que lee tiene un erotismo fuera de toda regla. Y los que escriben. Y los que pintan, esculpen, diseñan, crean, gozan de la creatividad propia y ajena… ¡LO INTELECTUAL -E INCLUSO LO INTELECTUALOIDE- ROCKS!
¡Viva el lado sensual de las Artes! ¡Y viva TÚ!
Hola Agustín, yo siempre me he mantenido en el lado de los lectores y siempre he admirado a aquellas personas capaces de imaginar una historia y saberla plasmar de forma que se entienda y a la vez te entretenga, te emocione o te enseñe. Salud para los que teneís ese don.
Agustín descansa en tus vacaciones
Muchísimas gracias por tus deseos, y por tu postura. Eres un SOL.
Querido HKB: a mí me parece que escribes muy bien y también que lees muy bien, quizás todo eso te hace más sexy…seguro que sí.
Que lo paséis muy bien.
Un abrazo a los dos.
一路顺风
¡Oh! ¡Qué maravilla que me veas así! TE ADORO. ¡BESOS!
Suerte compañero con tu novela; en cuanto que la publiques, la
compro. Un abrazo.