¿A buen enTinderdor pocas palabras bastan?

Que el mercado está fatal lo sabemos todos. Pero antes la muerte que el aburrimiento solitario en primavera.

Por eso, tanto las musas que andaban en periodo de hibernación (y elevado riesgo de revirginización a lo Leticia Sabater, pero gratuito) como las que buscaban ese “punto de magia en un compañero estable” han vuelto al ruedo cárnico.

 

No, ya no se habla de soltero, casado o comprometido en el mercado de la pasión. La diferencia es: disponible o no disponible. Y allá se las apañe el disponible con su conciencia.

Esta temporada la disponibilidad se lleva más que la chaqueta amarilla del Zara. Del Carpe Diem y al Carne Distrútem antes de que te quiten lo bailao.

 

Si hace un tiempo la gente se ponía “a punto” para mostrarse en verano, ahora se ponen las carnes prietas para hacerse un hueco (o todos los que se puedan) en citalandia.

Viva el crossfit, el pilates, el running, los triatlones, el bottox, los levantamientos de pecho… mostrados en Instagram. Sin foto no hay paraíso.

 

Más tersos, más jóvenes. La única diferencia entre la gente de veinte y la de cincuenta es la cartera (o el tener hijos).

Pero como no sólo de Tinder  (o Grindr, o Happn) vive el ser humano, hay aplicaciones para todos los gustos, multitudes y colores dolores. Y digo dolores porque la Musa Bruja insiste en que los sadomaso también tienen su círculo (y su moratón, si la cosa va bien). Por cierto, desde aquí hago un llamamiento en su nombre: stop entrarle tantos sumisos.

 

Como veis, hay algo que une a los seres humanos, y no es la búsqueda de la Paz Mundial, sino la del chollo de internet.

Chollos de Internet los hay, pero como en la lotería y los mercadillos, el azar y la criba / búsqueda marcan la diferencia hacia el éxito. Y lo mismo que lavarías determinadas prendas de segunda mano antes de ponértelas, usar protección (y en ocasiones una duchita) también es fundamental. Una cosa son las marcas de guerra y otra terminar en la lista de las bajas en combate.

 

¿Cómo seleccionar? ¿Se puede despreciar comida cuando se tiene hambre? Recordemos que no es sólo comer, sino hacerlo bien. Fast Food eventual ok, bombones envenenados, no.

La mayoría de las Musas exploran a sus candidatos con un vino (“el vino es LA opción” dicen, y no el café) ya que da mucha información.

 

Por muy deportistas que sean, dicen que si el tipo no bebe nada no les genera confianza, pero que si bebe mucho tampoco. “No me gusta la gente que no tiene vicios a la vista”, dice la Musa Roja, que ha descartado recientemente a uno por “excesivamente sano”.

 

Asimismo, según me cuentan, en la preselección cibernética gustan los que se cuidan aunque no es obligatorio, ganan los que tienen buena conversación, y pierden puntos los que a la primera de canto te mandan fotos un tanto explícitas.

 

Pero la clave es en la distancia corta, ¿siempre que no sea muy corta?

En fin, esta tarde he quedado con las Musas, a ver qué más me cuentan.

Por cierto, hoy es mi cumpleaños. ¡Cuarenta! ¡Qué heavy!

 

¡Sed muy felices!

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