Todo el mundo se monta su película, eso está claro, pero no de la misma manera. Hay quien falla en verosimilitud, quien se pasa de ciencia ficción, quien se excede en el drama… y quien la borda.
En mi caso yo suelo pecar de echar demasiada salsa en las escenas, pero es que hay que entender que siempre quise vivir del cuento. Corrijo: ser cuentista profesional. Y estas navidades, en Lanzarote, por poco lo consigo, porque pude disfrutar, contra pronóstico y Covid, de una residencia artística en un Hotel que “beca” con estancias a artistas para que puedan crear. Y oye, allí que nos fuimos PITICLI, nuestros anticuerpos y yo, tan ricamente. A crear.
Pero no sólo creamos (un relato yo, unos dibujos PITICLI), también realicé un máster. De cine y de la vida. Es lo que tienen Lanzarote y las Islas Canarias, que esa hora menos da para mucho, desde pensar a vivir.
Así, gracias a las conversaciones y las risas que compartimos con personas increíblemente sabias y enriquecedoras, aprendí lo siguiente:
– Tu vida has de dirigirla tú, no sólo protagonizarla. Y aunque tenga algunas incoherencias y el público no la entienda tú has de hacerte esta pregunta: ¿a ti te gusta? Si el resultado es sí, tira millas. ¡Es tu película!
-En los estudios para cineasta pasa como con la vida, que te ponen asignaturas. Y si no las apruebas, toca repetir. Hasta que las superes (así sea romance, ambientación, guión, casting…). Eso sí, ten presente que la matrícula cada vez es más cara. ¡Haz por superarlas y no repetir demasiado!
-Cualquier película, territorio o vida pueden ser observadas de distintas maneras desde el exterior. Europa ve a España de determinado modo, la península a Canarias, tus jefes a ti…. Pero lo importante es repetir internamente este valioso mantra de mis amistades lanzaroteñas: ellxs que digan lo que quieran que nosotrxs sabemos lo que somos.
-El personaje que crees para tu vida no sólo ha de cuidar sus actos, también su uniforme y apariencia. Si no encuentras el look, experimenta. Tanto como haga falta. No te cortes. Y nada mejor para ello que tener en tu casa un baúl lleno de pelucas y prendas diversas. ¡Déjate llevar! ¡Explora facetas! Y si el resultado de la prueba es muy histriónico, móntate una escena almodovariana. En este sentido he de decir que también tenemos unxs amigxs en Asturias con un baúl similar. ¡Y el juego que da!
-Para finalizar, al igual que existen los tráilers y los cortometrajes, es importante recordar que cada día es como tu vida en pequeñito. Vívelo como deseas. Como quieres que sea tu película.
Gracias Nautilus, gracias Lanzarote, gracias amigxs, habéis conseguido que los conceptos “privilegiado” y “agradecido” hayan alcanzado los máximos niveles con vuestra generosidad y compañía.
Un abrazo enorme.
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¡Que gran escenario de vida es Lanzarote! Un privilegio tu experiencia en la isla.
Absolutamente. ¡Besos!
Genial! qué envidia!, Creo que los godos, no apreciamos suficiente las maravillas de Canarias, aunque vosotros parecéis la excepción.
Magníficas fotos!
Un abrazo!, voy a seguir con mi película…
Exactamente, a veces nos ponemos de un Godo terrible. ¡Un abrazo y buena película!